El nacimiento de Jesús marcó la esperanza en el mundo entero, deja que la Navidad te envuelva de AMOR.

Navidad es gozarnos en la celebración del nacimiento del Niño Dios; el recordar que Belén es nuestro corazón, que debe ser preparado para la llegada del Mesías, el Redentor, el que habría de venir para la salvación del mundo, la redención de nuestros pecados. Hace más de dos mil años, Dios permitió que su Hijo se encarnara en el vientre de una virgen, mujer inmaculada, María, ejemplo de fortaleza y entrega a Dios. Hoy Jesús nace en cada uno de nuestros corazones, permitamos que ese acontecimiento sea acogido en lo más profundo de nuestro ser.

Qué tal si esta Navidad te animas a compartir dando con generosidad. Todo cuanto hagas será reproducido en tu favor a lo largo del año. Jesús nos invita a dar de lo que él nos regala, a ese compartir fraterno entre hermanos, a anunciar la llegada de ese Mesías, el cual debe ser es el centro de nuestras vidas.

El Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Diócesis de Chitré te desea una feliz navidad y un venturoso año nuevo.

Sábado 31 de diciembre, en la catedral san Juan Bautista de Chitré, adornada a fiesta, se ha reunido el pueblo de Chitré, de Guararé y santo Domingo de Las Tablas con el obispo, mons. Rafael Valdivieso, y todo el presbiterio diocesano, para la Ordenación sacerdotal de dos nuevos presbíteros: el diácono Agustín Antonio Córdoba Pérez de santo Domingo de Las Tablas, y el diácono Reynaldo José Díaz Vergara de Guararé.

Luego de los ritos iniciales de la Misa y de la proclamación de la Palabra de Dios, y antes de iniciar el Rito de la ordenación, el obispo se ha dirigido a los ordenandos y a la comunidad en su homilía, que ha iniciado con una hermosa comparación de la vida de la Iglesia con los bellos vitrales que adornan nuestra iglesia catedral San Juan Bautista. Desde afuera solamente se pueden apreciar manchas de colores indistintas, pero por adentro del templo se pueden apreciar los maravillosos detalles y los efectos de luces de los vitrales.

Así es la vida de la Iglesia: desde afuera se notan manchas indistintas, debilidades humanas, contradicciones y pecados. Sin embargo, desde adentro se perciben las maravillas que Dios realiza en las vidas de cada persona y se experimenta la fuerza de la Gracias santificante que transforma el corazón del hombre. Es en esta óptica cristiana que podemos entender el misterio de la ordenación sacerdotal por medio de la cual, a través de la imposición de las manos del obispo y de todo el clero, dos seres humanos, Agustín y Reynaldo, se convierten en ministros de los Sacramentos, dispensadores de la Gracia de Dios.

A estos dos hermanos, hijos de familias sencillas y miembros de nuestra comunidad diocesana, el obispo ha recordado que su liderazgo en la iglesia se debe parecer más a Cristo Buen Pastor que a otros tipos de liderazgos basados en poderes, habilidades, destrezas y títulos universitarios. El Buen Pastor comparte toda la vida con su rebaño, se consagra a sus ovejas y está dispuesto a dar la vida para defenderla. Mientras que los funcionarios ejercen una función, prestando un servicio a tiempo y en cambio de una remuneración, la característica del sacerdote-pastor es la gratuidad y la disponibilidad total. Solamente si el presbítero “huele a ovejas”, las ovejas reconocerán el olor del pastor y lo seguirán.

La presencia de las comunidades, donde los dos nuevos presbíteros han realizado su experiencia pastoral durante el tiempo del Diaconato, y el entusiasmo y cariño que mostraban es un signo evidente que ellos ya están bien encaminados por la sequela de Cristo Buen Pastor.

Al final de la celebración, el Canciller diocesano, padre José Ramón Rodríguez (padre Chemita), ha anunciado los nombramientos de los dos nuevos presbíteros. El padre Agustín Antonio Córdoba Pérez será vicario parroquial en la parroquia de San Pedro en Los Pozos y el padre Reynaldo José Díaz Vergara será vicario parroquial en la parroquia Santa Bárbara de Las Minas.

Concluyendo el obispo ha invitado a los jóvenes a responder al Señor que siempre está llamando, y de una manera jocosa ha remarcado que los últimos cinco sacerdotes provienen de la provincia de Los Santos, come decir a los herreranos: “póngase las pilas”...

Es fundamental que los padres de familias, los educadores, los catequistas y los maestros presenten el ideal de consagración al Señor ya que desde pequeños se va delineando en la mente y en el corazón de los niños el modelo de hombre y mujer que desean ser en futuro.

Hoy viernes 15 de diciembre, en el salón parroquial de la Parroquia san Sebastián de Ocú, se ha reunido todo el clero, en un Presbiterio extraordinario, para escuchar los informes de las diferentes Comisiones de trabajo que están comprometidas en la preparación de la JMJ Panamá 2019 y en especial de los días de preparación en la diócesis, conocidos como Días en la Diócesis.

Hemos escuchado los datos actualizados de las familias dispuestas a acoger jóvenes en su casa, nos han informado sobre los preparativos del Coro que se está formando, se ha aclarado la disponibilidad y la capacidad de los Transportistas de nuestra región de Azuero en recibir los jóvenes desde su llegada al aeropuerto de Tocumen y se ha presentado oficialmente a todos los presbíteros de la diócesis nuestro Boletín digital.

Todavía hay mucho trabajo por delante, sin embargo, ya se ven los resultados del esfuerzo conjunto de todas las personas involucradas y este se puede considerar ya como el primer éxito porque, gracias a las incumbencias de la preparación de la JMJ, estamos descubriendo una nueva manera de ser comunidad e Iglesia en camino.

En los próximos números de nuestro Boletín trataremos de presentar de manera más detallada el trabajo realizado y por realizar de cada Comisión.

Entre las distintas actividades navideñas que se han realizado en tosas las parroquias de la diócesis, esta semana señalamos el Paseo del Niños Jesús por las calles del corregimiento de Llano Bonito. Se trata de una iniciativa de la parroquia de Santa Teresa de Jesús que tiene como objetivo principal el de manifestar nuestra Fe en el Niño Dios, manifestación del Amor del Padre, compartiendo la alegría con todo el pueblo. Salir del templo y caminar por las calles sirve para suscitar la pregunta fundamental que despierta la fe: ¿Por qué hacen esto?” – y poderle ofrecer la respuesta más sencilla que es al mismo tiempo un testimonio personal de nuestra experiencia de fe: “¡Porque Dios nos ama y cumple sus promesas!”

Desde los primeros siglos del cristianismo ha sido esta la dinámica del anuncio: un testimonio genuino de los creyentes que producía una curiosidad, un interés, una pregunta. Y no hay mas efectivo y eficaz que una respuesta clara en el momento oportuno. Por este motivo, salir del Templo y llevar por la calle el mensaje del Nacimiento de Jesús tiene un valor evangelizador muy fuerte y los jóvenes y las familias de la parroquia san Miguel, guiados por su joven párroco, pbro. Eric Domínguez, lo han pensado y realizado con este propósito.

A partir del mes de enero y con frecuencia mensual se desarrollarán los temas propuestos en las catequesis y se implementarán también en los programas de la enseñanza de la Religión en todos los colegios de la región de Azuero. De esta manera se espera que todos lleguen preparados interiormente a vivir la gran experiencia de fe que representa la JMJ.

Las Misas de Aguinaldos son parte de una tradición originaria de España y en especial de las Islas Canarias de donde poco a poco se han ido difundiendo, primero en Filipinas y luego en América Latina.

Se trata de Misas que se celebran en horario muy temprano de la mañana y son acompañadas de mucha alegría y momentos para compartir un pequeño brindis.

Como dice el nombre “Aguinaldo”, son celebraciones del período navideño y cubren prácticamente los días de la Novena de preparación a la Navidad, es decir del día 17 al día 24 de diciembre.

La parroquia Catedral san Juan Bautista de Chitré, ha introducido esta novedad en la preparación a la Navidad y la participación ha sido exitosa porque a muchas personas, que siempre están ocupadas durante el día, le ha encantado la posibilidad de dedicar al Señor las primeras horas como primicia del nuevo día.

Las celebraciones se han desarrollado desde el 17 hasta el 24 de diciembre y cada día la participación ha ido aumentando, porque la forma en que se desarrolla y la alegría que difunde, además de recargar el espíritu con que se enfrenta el nuevo día, también fortalece los vínculos de fraternidad y amistad entre los miembros de la comunicad. Y hoy en día, donde todos corremos y estamos tensos por las tareas de cada día, iniciar la jornada con un encuentro especial con el Señor en la Eucaristía, y compartir algunos momentos de fraternidad es una terapia que nos hace bien porque cura el alma y el cuerpo al mismo tiempo.

No cabe duda de que se trata de una manera muy hermosa de vivir el Adviento y una excelente preparación espiritual para entrar en el verdadero espíritu de la Navidad.

Como decíamos al inicio del artículo, se trata de una tradición que se difunde rápidamente en América Latina porque es una experiencia contagiosa. En la diócesis de Chitré se inició esta experiencia en la parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes de la Arena y al principio se invitaban principalmente a los niños que son una fuente de energía y alegría, sin embargo, los papás que los acompañaban disfrutaban más que los hijos. Así este año en la parroquia catedral de Chitré la invitación era para todos aquellos que tienen un espíritu de fe alegre y contagiosa y la respuesta sido un éxito total.

Aquí compartimos esta experiencia con el propósito de difundir todavía más esta bella tradición para que todo el pueblo cristiano pueda tener su experiencia de alegría, reservando para el Señor una hora antes de comenzar el día, para encontrarse con los hermanos en la celebración eucarística y luego compartir con ellos una galleta o un dulce casero acompañado de una chicha.

Al terminar este artículo, investigando más, resulta que ya varias parroquias de la diócesis están celebrando las Misas de Aguinaldo.

En 1587, fray Diego de Soria obtuvo del Papa Sixto V la Bula autorizando la celebración en el Virreinato de la Nueva España de unas Misas, llamadas de aguinaldo del 16 al 23 de diciembre y que se realizarían en los atrios de las iglesias. Junto con las misas se representaban escenas de la Navidad. Luego de la Misa se realizaban festejos con luces de bengala, cohetes, piñatas y villancicos